El día de los muertos es más que fiestas o para socializar. Es el día de los recuerdos, un momento para que las familias se reúnan y compartan historias de recuerdo de aquellos que hemos perdido en nuestras vidas. Un día que tenemos para procesar las pérdidas de nuestros seres queridos.
“El Día de los Muertos es una oportunidad de vivir un duelo y recordar a nuestros seres queridos mientras se honra sus memorias”, dijo Julissa Huerta, profesora de James Lick High School. “Crecí en México rodeada de esta tradición, pero no fue hasta que comencé a trabajar como profesora aquí en Estados Unidos que comprendí su verdadero significado.”
“Al principio solo coloqué un altar sencillo con mis estudiantes para explicarles la importancia de la tradición” Huerta dice. “Nunca imaginó que crecería tanto.”
Con el tiempo, la celebración se extendió a todo el colegio, “Ahora, cada noviembre, los pasillos de James Lick se llenan de flores de cempasúchil, papel picado y fotografías. Los estudiantes, maestros y familias participan con entusiasmo”, dice Huerta como era celebrada la tradicion. “Es un día muy especial, porque no solo se aprende sobre la cultura mexicana, sino también sobre el valor de recordar y sanar.”
Al ser consultada sobre la idea de celebrar más el Día de los Muertos en colegios de todo Estados Unidos, Huerta fue clara, “Sería maravilloso que más escuelas adopten esta celebración”, dijo. “No solo porque representa una parte importante de la cultura latina, sino porque ayuda a los estudiantes de todas las culturas a hablar de la muerte desde el amor, la memoria y la esperanza”.
Para ella, esta tradición trasciende fronteras, “El Día de los Muertos enseña empatía, respeto y conexión humana” .dice “Recordar es una forma de seguir adelante”
